El amor no es fácil

 El amor no es fácil, es complicado, hay que sortear las grandes olas del mundo, cuántas veces hemos tropezado, caído y nos hemos vuelto a levantar, así es la vida, un viaje no siempre cómodo, pero al final lo que importa son los paisajes, las aventuras, las historias, la complicidad y las ganas de seguir viajando juntos.

Mañana es tu cumpleaños y al mismo tiempo nuestro aniversario, vamos a celebrar 15 años de haber jurado amor a un juez, pero son ya 21 años de la mano desde aquella vez que te ví en el Pedacito de Cielo, son ya 3 años de haber sellado nuestro amor por la eternidad. Es una vida entera de la mano viendo el mundo girar.
A veces me preguntan ¿Cuál es el secreto para durar tanto tiempo?, como todo en la vida les digo, esforzándose, no dar nada por perdido, luchar con vehemencia, poner como prioridad la familia. El amor se cultiva, se abona y se cosecha. No es fácil pero en este mundo loco de relaciones pasajeras, vale la pena luchar por algo que dure toda la eternidad.

Amenazas

 Amanecí pensando en las increíbles amenazas del universo,

en las amenazas de las coincidencias,
en las amenazas de las casualidades
y de las causalidades.
Amenazas contra mi, contra ella, contra todos,
sobre todo hoy que mi aliento se alimenta de soles centellantes,
de días sonrisas y de miedos enfrentados,
sobre todo hoy que voy en cada paso sintiendo con emoción el huracán de todos mis amaneceres juntos,
hoy que mi voz es el rugido de la corriente feroz del Pastaza,
intentando perforar el encañonado de lava.
Hoy que mi mirada es la de los yachaks asesinados, disgustados e indignados de la selva,
hoy que he quemado todos los libros de historia, de autosuperación y todos los miedos en el fogón de mi hoguera,
justo hoy que mi felicidad no programada me rodea,
llegan las amenazas,
y les digo gracias, ustedes son maestras de experiencias,
de lecciones urgentes, de cinceles esculpiendo una
mejor versión.
Gracias

Por donde el sol sangra

 Las aves siguen deteniéndose cruelmente en los cables frente a mi ventana, para recordarme con su canto que pertenezco a un puente, a un río y a una selva.

Y que inevitablemente mis aguas corren junto al de mi amada,

en ríos diferentes, apenas separados, y que aunque hoy no me habla, ni me mira, mañana sus aguas inundaran todo mi ser, formando un solo río.

Sus aguas inundan todo mi caudal y se funden juntos en un choque sobrenatural, de sentimientos y miedos como el instante en que el agua dulce de nuestra fuente desemboca y golpea con temor en el inmenso océano de sal.

Fundiéndose y golpeándose cerrados los ojos, para no ver el impacto, aunque no tenga idea lo que vaya a pasar mañana, no de lo que podrá ser.


AGUA DE WAYUSA

Hoy amaneci de un solo salto asustado,

para ver el presentimiento nocturno,

en mi sueño vi un mundo verde,

afuera yacía si un mundo perfecto pero estaba  sin ti,

me quede suspendido por el purpura, rojo, y amarillo color del amanecer,

pero esa misma sensación me provocaron tus negros y brillantes pupilas,

lastima que estes tan lejos de mi,

tu recuerdos son de un éxtasis de amor y dolor a la vez.

 

Hoy arrastró las cadenas pesadas de mi fe,

sin haber conseguido un poco  de paz,

vuelo atrás para ver incendios ardientes.

 

Hoy bebí agua de wayusa como mis ancestros,

para volver al principio de todo,

para recuperar el cuerpo perdido,

adolorido por tantas penas y dolor autoflagelado,

no logre nada,

por que mis penas son también,

de injusticias centenarias.

 

Hoy me fui a caminar por la montaña solo,

para ver tu rostro a plena luz del dia,

para guardarte en mi memoria eternamente.

 

Afuera hay tanta mentira,

y yo sigo pensandote,

como dejar de hacerlo,

como lograr sacar el veneno,

si para mi fuiste lo mas verdadero.

 

Hoy me pareció mentira haberte conocido,

musa inquieta de mil sonrisas,

estas tan cerca y tan lejos.

 

Hoy no me gusto lo que vi en el espejo,

por que mi juventud muere sin ti,

los años pasan inexorablemente,

sin ti es condena mortal.

 

Quiero cambiar un mundo lleno de sordos,

esta es una larga antesala a la soledad,

como vencer esos gigantes molinos de viento sin fe.

 

Puyo ciudad nublada,

cuando podremos verte sonreir?,

ese día se aplacara mi dolor,

y el sueño de verte limpia y digna,

será por fin dias de luz verdadera.

 

Vengo del Ecuador común y corriente.

De ese país que no sale en la historia oficial,

de barrios bajos como la Tola o la Marín,

soy parte de los de abajo,
de los que salen a las calles,
de los indignados,
de los vendedores ambulantes,
de los pueblos dignos de la selva,
de los de lanza,
de los de poncho,
de los del páramo,
de los del yawarmishki,
de los que toman asua,
de los guerreros del arco iris,
del gueto marginal,
de los que no tienen ruc,
ni servicio social,
de los que migran,
de los abandonados a su suerte,
de los que roban para comer,
de los que no tienen nada,
y no temen perder nada.
Soy como la mayoría,
estudiantes,
trabajadores,
pescadores,
agricultores,
médicos,
enfermeros,
de los que cargan todo el puto día.
De los que retaquean,
de los malabaristas del semáforo,
de los que quedaron sin ojos en octubre,
de los asesinados por la policía,
de los abandonados al virus,
de los que lanzaron la piedra
y no escondieron la mano.
De los hacen un cachuelito,
de los que recogen las monedas,
de los sin internet,
de los sin computadora,
de los sin escuela,
de los anulados,
de los discriminados,
de los universitarios endeudados,
de los sin servicios básicos,
de los que invaden,
de los que resisten,
de los que van repletos en el trole,
de los deportistas con ñeque,
de los hospitales colapsados.
Somo la mayoría,
y sin embargo seguimos,
sin tocar a los explotadores.
Vengo del Ecuador común y corriente.
Diego Escobar